La marca Cimalp, es una marca francesa de montaña creada en 1964 por un alpinista. Se encarga de desarrollar productos técnicos y fiables, a precios accesibles para todos los bolsillos. Desde los Alpes, CIMALP se caracteriza por no disponer de tiendas físicas, sino sólo de venta online.
Algunos #patroncarrerasdemontana de nuestra web hermana Carrerasdemontana.com, han tenido la oportunidad de probar varios de sus productos, como podéis ver en las pruebas a fondo de la ropa técnica (camiseta y pantalón) hecha por Vlady, o el conjunto de falda y camiseta de nuestra compi Layla, y la verdad es que quedaron bastante satisfechos con la marca.
Estas gafas que hoy os vengo a presentar, llaman la atención por su diseño y su ligereza, con tan solo 26 gramos, y ultra ventiladas, con seis ranuras en la lente y con revestimiento NoFoG que evita la formación de vaho, incluso durante el esfuerzo extremo. Además son unas gafas ultra técnicas, ya que han sido desarrolladas por atletas top de Francia como Amandine Ferrato, Marie Dorin-Habert o Romain Olivier.
Así pues sus características generales de estas My Vision One son:
- Precio: 69.90€
- Peso: 26 gr.
- Lentes de policarbonato de 48mm sin marco e irrompible, con 6 ranuras de ventilación, homologada según las normas EN ISO 12312-1-A+2015 y conforme a las leyes vigentes de los países de la Unión Europea. Hay 3 tipos de lente a elegir con tecnología SPECTRE y protección 100% anti-UV: lente MIRROR de categoría 3 con un 92% de filtración de la luz, y lentes REVO rojo o azul de categoría 3 también pero con un 95% de filtración de la luz.
Personalizable: más de 700 opciones gracias al configurador 3D-CIMALP. En esta ocasión, unas gafas de sol que nos permiten personalizar de manera que puedas elegir una gafa a tu gusto y que combine perfectamente con tu personalidad.
- Montura: GRILAMID TR90.
- Protección: 100% anti-UV.
- Puente nasal independiente de la montura, evitando el efecto rebote que pudiera aparecer durante la carrera, además de estar realizado con un material antideslizante que permite regular la separación y la altura en el puente nasal, de forma que queden perfectamente ajustadas a nuestra cara.
- Patillas ajustables en altura y separación por la zona de los extremos, adaptándose perfectamente a la forma de nuestro rostro. Se puede apreciar en la foto, que tras el uso, la marca se está borrando, algo que se tendría que mejorar para que durara más.
- Posibilidad de elegirlas con Insert óptico (sólo para los que lleven gafas de visión) en el caso de que se necesite regulación de la vista para que se puedan utilizar sin necesidad de lentillas. Una muy buena iniciativa, ya que yo que llevaba gafas antes, y es un incordio el tema de lentillas y demás para hacer deporte.
Primeras impresiones:
Cuando recibí estas gafas, llamaron mi atención, porque el diseño me gustó mucho y, al cogerlas, me parecieron súper ligeras. Os he de confesar que yo no soy muy fan de las gafas de sol para hacer deporte, prefiero una gorra o una visera, ya que no me acostumbro a llevarlas y me da la sensación de no ver lo suficientemente bien el terreno o el paisaje. Está claro que unas gafas de sol, nos van a proteger mucho más de los rayos que una gorra, así que os voy a contar qué tal me he sentido con estas Cimalp My Vision One, ahora que ya sabéis mi secreto…
Prueba a fondo 200k:
La primera vez que las llevé, fue en una salida que hicimos los #Velveteros realizando la primera parte de la Jorgeada, 34km yendo desde Zaragoza a Zuera caminando. Elegí esa salida para ir haciéndome a ellas, ya que íbamos a ir a un ritmo muy cómodo. Ese día nos hicieron unos 40 grados más o menos, así que os podéis imaginar el calor que hacía y el solazo que teníamos sobre nuestras cabezas. Esta es una ruta en la que se va siguiendo un GR por pista, y en la que no hay casi ningún árbol. Me las puse en que empezó a amanecer, regulando las patillas un poco para que se ajustaran bien a mi forma de cara, y me fueron perfectas para evitar el contacto del sol en mis ojos. Además por mucho calor que hiciera, las lentes permanecieron limpias, sin empañarse por el vaho, así que punto importante a tener en cuenta.
Otras salidas en las que las pude llevar caminando, ahora sí en alta montaña, fue en picos como el Posets, Collarada, Peña telera, o Mulhacén, rutas de muchas horas, en las que me sentí bastante cómoda llevándolas, ya que como decimos se pueden ajustar al rostro de cada uno, y son muy muy ligeras.
Para llevarlas corriendo, primero me las puse en los rodajes suaves que hago por la ciudad, y así ver qué tal me sentía al empezar a usarlas de esta manera. Suelo salir al atardecer, así que con el sol de frente, me venían genial, y a esos ritmos de 6 o 5.30/km respondían bastante bien.
Cuando salí de vacaciones, a parte de esas rutas impresionantes que os he nombrado antes de trekking, hice alguna salida con Vlady caminando más rápido y corriendo, como Moncayo, Garmo Negro, los Algas, o Argualas. Después de ajustar bien las patillas y el puente, van muy bien, ya que ese es un detalle muy bueno para que se adapten a todo tipo de rostros. Mi cara es ovalada y delgada, y mi cabeza y mis orejas son pequeñas, así que las tengo que amoldar bastante a mí. Pero como digo, responden correctamente, se adaptan muy bien, y casi ni se nota que las llevas puestas, por lo ligeras que son.
Ahora bien, estoy haciendo el Ranking Etrail Zaragoza, un campeonato de carreras de la provincia, en la que haces los segmentos y los subes a Strava, la plataforma digital. Las distancias que de momento he elegido, son las que van de 10 a 20 kilómetros, y son recorridos en los que puedes correr mucho y a buen ritmo. Aquí es en el único caso, en el que las gafas no me han dado muy buen resultado. Como sabéis en Zaragoza hace mucho calor en verano, y yo soy de las personas que, al hacer un esfuerzo grande como es el caso, sudo mucho. Pues el aspecto a mejorar sería ese, que a ritmos altos y con sudor, se resbalaban por la nariz, aun ajustándolas todo lo que se podía.
Conclusiones:
Al final, me he acostumbrado a llevarlas, sobre todo haciendo caminatas, ya que son súper ligeras y da la impresión de no llevar nada. Además no se empañan con el vaho, y se adaptan bastante bien a la cara. El desgaste que tienen es mínimo, están como nuevas. Y el único inconveniente que he tenido con ellas, es que a ritmos más elevados se me resbalan por la nariz con el sudor, ya que yo sudo mucho. Esperaré al frio para volverlas a llevar en estos casos, ya que en invierno no sudo demasiado, y ver si me conquistan en esto también.
Así que lo dicho, si estáis pensando en cogeros unas gafas de sol para hacer deporte, estas son una muy buena elección, que te protegen perfectamente del sol, ligerísimas, moldeables a la cara, y con posibilidad de hacerlas a tu gusto, además de tener un precio bastante asequible.
¡¡Nos vemos muy pronto por aquí compis!! A disfrutar del otoño que empieza, y a seguir viviendo y soñando como siempre #HastaAlcanzarLasNubes