Nuestra compi Victoria nos trae una nueva crónica de carrera, en este caso Transchinepro Trail donde se animo a estrenarse en la distancia de 21km, aquí tenéis su crónica
El pasado domingo 5 de junio se celebró, en Caldearenas, localidad oscense enmarcada en el seno de la Comarca del Alto Gállego, la 5º edición de la carrera Traschinepro Trail con dos recorridos: uno de 10km y 119m D+ apta para corredores y andarines y otro de 21km con 1050m D+.
Yo me presenté a la larga, de hecho, ha sido mi primera carrera de 21km. Sí que había hecho una más corta aunque con más desnivel, pero ésta ha sido mi primera media maratón de montaña. Antes de contar mi experiencia, algo que me gustó mucho del evento, es que por cada inscripción se donó 1 euro a la Fundación por el síndrome de Dravet. Para quien no lo sepa, como yo antes de leer sobre ello, se trata de una de las epilepsias congénitas más severas que afecta a 1 de cada 6.000 nacimientos y sus síntomas comienzan a los seis meses de edad.
Bueno y después de unos días algo nerviosilla, llegué con una amiga a Caldearenas. Ella iba a hacer la de 10km, su primera carrera. El ambiente desde el principio fue muy bueno, la gente muy agradable, cogimos los dorsales y a esperar.
La carrera salía del pueblo, siguiendo la senda de Izarbe. Subes, cresteas la sierra y bajas. No iba competir contra nadie, ni buscaba buenos tiempos porque sé que ahora mismo no es algo que me pueda plantear, tampoco soy una persona competitiva. Correr me apasiona, pero yo empecé tarde por problemas médicos y básicamente me pasé toda la adolescencia haciendo trabajos escritos en vez de hacer la clase de gimnasia que tocaba. Pero una vez que empecé…. ya no he querido parar. Así que quitarme el miedo a ponerme un dorsal y terminar las carreras que me proponga, para mí ya es un gran logro.
Para mí fue una carrera dura, hacía muchísimo calor, me dio flato casi desde el principio hasta el kilómetro 5, luego en el km 8 empecé con problemas de estómago, todo esto mientras sudaba lo que nunca. Pero esa parte de mi cerebro que se encarga de darme toques de atención en momentos bajos, me decía. “¡Vic dale duro! Hace unos meses no te veías ni haciendo la mitad de esto” (He salido también de dos lesiones…y se ha hecho difícil, la verdad)
¡Venga Vic! ¡que lo estás haciendo y eso es lo que importa!
A veces no puedo evitar sentirme mas pequeñita por ser siempre de las últimas, por no volar como hace todo el mundo en las salidas, por no aspirar a podio, por no poder, por ahora, hacer carreras más largas… Pero luego pienso que estoy haciendo algo que no todo el mundo hace, y la verdad, me da igual el mundo, en el sentido de que cada una con sus locuras y aficiones, que al final es lo bonito . Yo, esto, lo estoy haciendo para mí, porque me hace feliz y punto. Eso es lo que tiene que importarme y lo sufrí muchísimo pero no dejé de sonreír en 21 km. Bueno algún tramo en la subida no estaba para mostrar sonrisas, pero el resto prácticamente fue así. Y cuando acabé y bebí no sé cuánta agua y comí melón como si no lo hubiera probado nunca, de lo primero que pensé fue… ¡Las ganas que tengo de que llegue la siguiente carrera que es en unas semanas!
Así que… qué puedo decir… adoro el Trail, adoro la montaña, adoro sufrir de esta manera, adoro entrenar para conseguir disfrutarlas más. Adoro todo lo que me hace sentir este deporte. Y Caldearenas, Traschinepro Trail, ha sido mi primer 21k y le guardaré un cariño especial. Por cierto, dicen que las vistas son muy bonitas mientras corres. Algo vi, pero más el suelo que pisaba. ¡Tendré que volver!