Nuestra amiga Noelia nos trae su crónica de la Trebol Trail de Trangoworld del pasado 11 de Mayo.
«Ya el año pasado me quede con ganas de participar en esta carrera, y además me hablaron muy bien de ella, pero por diversos motivos que me coincidieron no pude participar, así que este año lo tenía claro, y como entrenamiento de cara a la maratón de los diel mil del Soplao que tenía en dos semanas, me vendría fenomenal.
La semana anterior no había podido entrenar lo que me hubiera gustado, ya que había estado con problemas de estómago, supongo que algún virus que rondaba por el ambiente me pillo, así que no me quise agobiar y me lo tome como semanita más de descanso de cara a la carrera.
La tarde anterior hablo con Nuria para ir juntas en coche, no teníamos el dorsal y tendríamos que ir pronto por si había jaleo para recogerlos, así que a las 7 paso a recogerla por su casa.
De camino en el coche, como es habitual, no paramos de hablar, tenemos el Soplao a la vuelta de la esquina y andamos ya nerviosas, pues en mi caso será mi primera distancia larga y no sé si mi cuerpo y mi mente lo aguantarán.
En el trayecto aprovechamos para llamar a Anita (Memphis), que desde el día anterior a las 11 de la mañana está participando en los 101 km de Ronda, ya estará terminando y queremos darle ánimos en esos últimos km que imaginamos tienen que ser duros, son ya muchas horas.
Recogemos a María en Alpedrete y nos ponemos en marcha rumbo a Becerril. Cuando llegamos la recogida de dorsales está muy tranquila, así que bueno nos relajamos ya que nos sobra tiempo pero lo preferimos.
Comienzan a llegar Maribel, Bárbara, Ali (que viene a animar a su chico y a nosotras 😉 y algunos bandoleros.
Hace un día estupendo, soleadito y la sierra se ve preciosa, por lo que no da ninguna pereza, todas tenemos ganas de arrancar.
Pistoletazo de salida y allá vamos, salimos todas al trote y poco a poco cada una va cogiendo su ritmo. A pesar de haber tenido una semana flojilla, parece que me encuentro bien de ritmo así que salgo contenta. En seguida dejo de ver a Maribel y a Bárbara, tienen un ritmo más rápido y hoy no puedo seguirlas, no quiero ir por encima del mío, además según me han comentado las subidas son algo durillas, así que prefiero ser prudente.
A lo largo de todo el recorrido no hay posibilidad de pérdida, la carrera está muy bien señalizada y a eso se suma que en algunos puntos de control está Jorge, Marga y Lito, siempre da mucha alegría y ánimo encontrarte a gente conocida y en este caso todavía más porque son amigos a los que aprecio y tengo mucho cariño.
En la primera subida según vas avanzando se oye de fondo el sonido de un cencerro, que te hace desconectar un poco del cansancio que supone subir y vas mirando de donde procede, por lo que al verlo se te pone una sonrisa en la cara que te ayuda a seguir subiendo hasta llegar al final.
En el segundo avituallamiento paro a comer algo, un poquito de plátano que me sienta de maravilla. Allí esta Raúl (Kbralok) haciendo fotos a los distintos corredores, por lo que da mucha alegría también verle allí. En seguida llega Nuri a este avituallamiento, la intento esperar pero prefiero continuar para no quedarme fría ya que ella quiere comer y beber algo para reponer.
En las bajadas es muy buena, por lo que en seguida la tengo pisándome los talones, y ya vamos un rato juntas, comentando la carrera y como vamos. Nos encontramos a David y a Pablo, que han venido como apoyo y a seguir la carrera a su ritmo, por lo que en ese momento nos echamos unas risas.
Aunque no es algo que me guste para carrera pero he tenido que estrenar zapatillas, ya que hace tiempo andaba detrás de las Saucony Xodus 4.0 que quería para la distancia del Soplao, y al haber tenido problemas con el pedido y con su recepción, no me queda de otra que estrenarlas en la Trebol para comenzar a darles rodaje. Lógicamente esto me supone un par de rozaduras que comienzo a notar en el km 10, y que me hacen ir incomoda y no poder disfrutar como me gusta del resto de carrera, pero bueno ya solo quedan 8 km.
La segunda subida es la más dura de las tres que hay, y mis piernas las noto flojas, les cuesta, por lo que lo achaco a mi semana de poco entrenamiento, pero intento no agobiarme y continuar poco a poco a mi ritmo.
Superada también la tercera subida, ya solo me queda bajar y un trozito de asfalto que me espera hasta la llegada a meta.
La bajada es muy chula y la disfruto bastante a pesar de la rozadura en el pie. Me encuentro a Ceci y a Eliseo, que ya la han terminado y vienen en dirección contraria supongo que como apoyo a la organización controlando al resto de corredores que quedamos por llegar. También a Jorge de nuevo, que me dice que quedará como km y medio, ya estoy en el asfalto por lo que las ganas de llegar son tremendas, y comienzo a estar agotada.
Por fin visualizo la llegada a meta y allí veo a Maribel, Bárbara y a Nuri, que las abrazo contenta, muy contenta, otro reto más conseguido…ahora a disfrutar del picnic que nos espera con el resto de bandoleros y bandoleras»
